domingo, 2 de noviembre de 2008
DE LA ESPERANZA, LA MUERTE Y LA VIDA. TU VIDA.
 Había una vez un niño que lloraba. Había una vez un hombre que lloraba. Había una vez un anciano que lloraba. Ni Cielo ni Infierno. Aquí simplemente el Mundo, tú y yo y ellos. Y simplemente aquí. La muerte es vida y la vida es muerte. Nacemos con fecha de caducidad. Odiamos con el límite de nuestra infelicidad. Amamos inconscientemente aquello que envidiamos. Y nos matamos racionalmente obviando el alma, el espíritu, la energía que nos une. Soñamos sin límite limitándonos a soñar. ¿Y qué mejor sueño que la realidad del amor? ¿Acaso existe algo mejor que ser amado, que sentirse querido y apreciado? Nos odiamos y por eso odiamos. Competimos porque ignoramos que el dinero sólo compra la pseudofelicidad. Ignoramos que somos uno. Ignoramos que más allá del futbol existe la Comunión. Y más allá de la intuición está el alma, que nunca se equivoca porque siempre ama. La común unión de nuestros esfuerzos. Nos dámos asco sin necesidad. Nos defendemos por necedad. Y al final de todo, cuando sólos nos enfrentamos a la vieja amiga, cuando no hay gomina que valga, ni ambiciones ni vil metal, cuando no hay palabras, ni excusas ni marketing que valga, llamamos, gritamos a la esperanza... !Esperanzaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! !Esperanzaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! ¿Alguien puede responderme? !Esperanzaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! Y un tic tac martillea nuestras sienes. Un tic tac inexorable, ya no hay marketing que valga. Tú a solas, tu alma frente a lo insondable... ¿Alguien puede responderme? Etiquetas: muerte esperanza gritos sienes noches marketing oscuridad luz amor odio |
